Esta tarta la hice en San Miguel que es en Septiembre (esa fué la versión con crujiente, todo un éxito) se la hice a mi hermana para su cumpleaños y en mi casa ha quedado bautizada como la tarta de San Miguel y hace unos días preparé la versión con frosting, que tuvo un éxito rotundo en una cena con amigos...de hecho faltó...todos repetimos...
Este pastel es muy suave, blandito y refrescante, muy apropiado para servir directamente del frigorífico, por lo que me parece ideal para el postre veraniego o para la merienda...ya sea con cobertura crujiente o con frosting está delicioso, y además podemos hacer la versión sin gluten, que no tiene nada que envidiar a la normal, por lo que toda la familia puede disfrutarlo al máximo....
La receta está en dos versiones, una un poco más laboriosa (aunque si disponemos de tres moldes o dos moldes iguales no habrá problema) y otra más sencilla, en la que el bizcocho va de una sola vez y lleva menos ingredientes, éste se puede cortar por la mitad y rellenar, pero con la cobertura superior es suficiente, ya lo creo...
En ésta foto no están cubiertos los laterales con la crema, (sorry, se me olvidó hacer la foto) es lo que tiene preparar pasteles para llevar, que con las prisas se olvidan los cortes o las coberturas, jejeje
INGREDIENTES
Para el bizcocho:
500 gr. de manzanas
200 gr. de mantequilla
200 gr. de crema ácida (se puede sustituir por creme fraiche) o por yogur griego
280 gr. de azúcar
100 gr. de harina de trigo
la cáscara rallada de un limón grande y su zumo
6 huevos (separadas las yemas de las claras)
Para la cobertura crujiente:
50 gr. de mantequilla fría
100 gr. de harina
50 gr. de azúcar moreno
100 gr. de frutos secos (almendras en granillo o avellanas)
Relleno:
250 gr. de queso mascarpone
100 gr. de azúcar
300 ml. de nata montada
una cucharadita de esencia de vainilla
ELABORACION
Precalentar el horno a 160º mientras que preparamos el bizcocho.
Necesitamos 3 moldes de 20 cm. o con un solo molde hacemos tres bizcochos dividiendo la cantidad de mezcla en tres partes iguales.
Derretir la mantequilla en una sartén a fuego lento, pelar y picar las manzanas en rodajas finas y saltearlas a fuego medio en la mantequilla hasta que estén tiernas.
Batir la crema ácida, la ralladura y el zumo del limón, el azúcar , las yemas de huevo y la harina y verter sobre las manzanas aún en el fuego, removiendo la mezcla unos 5 minutos o hasta que se espese como si fueran unas natillas. Retirar del fuego, verter en un bol amplio y dejar que se enfríe.
Una vez que la mezcla esté fría, batimos las claras a punto de nieve hasta que forme picos y las mezclamos suavemente en un bol amplio con la crema de manzanas , dividimos la masa en tres partes .
Forramos la base de un molde desmontable con papel de horno y ponemos la mezcla correspondiente a un primer bizcocho, horneamos unos 30 minutos; una vez horneado le quitamos el aro y lo dejamos sobre el papel de horno, procedemos así con los siguientes bizcochos.
Mientras que los bizcochos se hornean preparamos la cobertura batiendo el mascarpone, la vainilla y el azúcar, montamos la nata y la añadimos a la mezcla con movimientos envolventes y reservamos bien fría.
También preparamos la cobertura crujiente, mezclando con las manos, la mantequilla con el azúcar y la harina hasta obtener una especie de arena gruesa, añadimos los frutos secos y reservamos.
Montaje de la tarta:
Ponemos el aro del molde que hemos utilizado sobre el plato dónde vamos a presentar la tarta, ponemos dentro uno de los bizcochos, lo cubrimos de crema y así hasta poner el último bizcocho, cubrimos por último con la cobertura crujiente de frutos secos y quitamos el aro.
Calentamos el horno a 200º y ponemos el pastel dentro del horno dejándolo hasta que la cobertura esté ligeramente dorada, sacamos para que se enfríe.
Una vez fría cubrimos los laterales del pastel con la crema que nos haya sobrado y enfriamos antes de servir.
VERSION SIN GLUTEN
INGREDIENTES
Para el bizcocho:
500 gr. de manzanas
200 gr. de mantequilla
200 gr. de crema ácida
280 gr. de azúcar
100 gr. de harina de maiz (maicena)
la cáscara rallada de un limón grande y su zumo
6 huevos (separadas las yemas de las claras)
Para la cobertura:
300 gr. de queso philadelphia
150 gr. de azúcar glacé
100 gr. de mantequilla
300 gr. de nata montada
una cucharadita de esencia de vainilla
una cucharadita de canela en polvo
Para decorar:
granillo de almendra caramelizado (opcional para los celíacos porque no estoy segura de si al caramelizar el granillo utilizan gluten, así que mirar la marca antes de utilizarlo)
cacahuetes bañados en chocolate
ELABORACIÓN
Derretir la mantequilla en una sartén a fuego lento, pelar y picar las manzanas en rodajas finas y saltearlas a fuego medio en la mantequilla hasta que estén tiernas.
Batir la crema ácida, la ralladura y el zumo del limón, el azúcar , las yemas de huevo y la harina y verter sobre las manzanas aún en el fuego, removiendo la mezcla unos 5 minutos o hasta que se espese como si fueran unas natillas. Retirar del fuego, verter en un bol amplio y dejar que se enfríe.
Una vez que la mezcla esté fría, batimos las claras a punto de nieve hasta que forme picos y las mezclamos suavemente en un bol amplio con la crema de manzanas fría.
Forramos la base de un molde desmontable con papel de horno y ponemos la mezcla, horneamos unos 40 minutos; una vez horneado le quitamos el aro y lo dejamos sobre el papel de horno para que se enfríe.
Mientras el bizcocho se hornea preparamos la cobertura batiendo el queso philadelphia con la mantequilla blanda (no liquida), la vainilla, vamos añadiendo el azúcar glacé poco a poco, por otro lado montamos la nata y la añadimos a la mezcla con movimientos envolventes y reservamos la cobertura bien fría.
Cubrimos el pastel con una capa abundante de cobertura y metemos en el frigorífico, al rato lo volvemos a sacar y lo volvemos a cubrir con una abundante capa de cobertura y por último le ponemos canela por encima a la hora de servir. (también podemos cortar por la mitad y rellenar con la cobertura)